ESTADO CIVIL: SOLTERA

Dicen que estamos en el mejor momento para ser solteras: Las mujeres nunca han sido tan independientes, tener infinidad de amantes al mismo tiempo, no tener que sacrificar el trabajo de tus sueños con hijos o pareja y todo lo que la soltería conlleva. 

Sobre todo los domingos de resaca asegurándote que la mejor opción para ti será adoptar a varias mascotas. 

- ¡Pero si tienes Tinder! No te creo que no hayas conocido a nadie interesante. 

-Si por interesante te refieres a un cojo cocainómano o un depresivo mitómano, pues me gano varias medallas al esfuerzo.

Hasta que llega el viernes, y tu que habías preparado el consolador y la porno para pasar el rato, recibes un mensaje de tus amigas obligándote a salir de cacería.  

Todas las mujeres solteras de mi generación aun seguimos pensando que encontraremos al hombre de nuestro sueños en un bar. O más bien que el nos encontrará y salvará de nuestra condicion "indigna" alborde de los 30. 

Salimos en búsqueda de ser salvadas por ese príncipe al quien estaremos eternamente agradecidas por el beso que nos desperto de un eterno sueño. Porque esta bien eseñarle a los niños que besar a una chica inconsciente es salvarla, ¿no?

Felizmente Blanca Nieves tenía a los 7 enanos. 

Así que te acicalas y sales vestida casi exactamente igual con las 3 amigas solteras que te quedan, 4 si es que una de ellas está en el típico break de 5 días con el novio que no es bueno para ella pero le faltan aun varios meses para darse cuenta porque "es que huevona a mi no me gusta dormir sola y que flojera conocer a alguien nuevo". 

-¿Listas? 

-¡Listas!

Sacas un poco las tetas y entras riéndote más alto de costumbre, aunque nadie dijo nada gracioso, y te vas directo al bar desde donde poder tener una mejor perspectiva de la situación. Para demostrar que eres una mujer independiente y de alto rendimiento económico te pides un cocktail.

Bueno también por el hecho de que luego de un primer escaneo, va a ser una noche dura. 

- Felizmente me dijeron que era el bar de moda. 

- ¿Alguien tiene un babero? Creo que ese aun tiene los dientes de leche.

- Me arrepiento tanto de haber salido en tacos. 

- Está a punto de acabarse mi batería lo que significa que voy a tener que mirar a la gente a la cara...mostro. 

Momento en el que vas al baño y luego de demorarte 10 minutos tratando de cerrar correctamente el body que escogiste para la noche pero que probablemente nadie terminará de ver por completo, decides darle un par de horas a la situación antes de hacer una Cenicienta y poder ir a casa para sacarte la faja. 

Luego te miras en el espejo y respiras profundamente mientras que exclamas a los cuatro vientos (mentalmente claro).

- Por la reputa San Judas, ¿Cuál es mi problema? 

Quizás podamos empezar por el hecho que estas en una manada de cuatro mujeres con caras amenazadoras porque están hasta el coño de los tacones, el maquillaje y los ligues de una noche que nisiquiera recuerdan su nombre al día siguiente. 

Yo tuve una vez uno que pensó que me llamaba Antonia...mostro. 

Porque como me dijo un sabio amigo hace mucho, cualquier hombre estaría aterrado de acercarse a ese grupo. 

Y tu hombre, que estas leyendo esto podrías pensar ahora mismo: Que fácil, si te declaras como tan feminista e independiente, ¿por qué no te acercas tu primero?

Y creanme señores, que lo he hecho. Incontables veces. Luego de un par de shots claro.

La tasa de éxito siempre fue muy baja. Y es que mientras sigamos siendo consideradas como inferiores, el salir del rol típico femenino no pone. No es sexy, aunque nadie quiera admitir que en el fondo todos tenemos miedo. 

Miedo a que te vean como realmente eres: Una mujer que sabe lo que quiere en la vida. 

El problema es que nadie quiere ser presa, y ni que decir presa facil. Y si es que lograste pasar la primera barrera del contacto ya sabes la siguiente regla: manten la conversación ligera, no te pases de lista ni de filosófica, haz como que no sabes muchas cosas para que él pueda explicártelas y no se te ocurra decir lo que de verdad buscas enfajada y entaconada en ese bar. 

Porque aunque una mujer pueda querer una relación, el simple hecho de mencionar esa palabra puede asegurar que la otra persona salga cual correcaminos. 

Entonces tomamos las típicas tangentes que nos aseguran continuar la interacción: "Nah, no quiero nada serio, ¿para qué?" o "Uff no, pensar en algo serio me da ansiedad" o mi favorito "Solo busco a alguien con quien compartir una cerveza y una historia, el resto ya se verá".

Porque esto no es el confesonario en donde te van a felicitar por decir la verdad. 

Y mientras más complicadas vemos las interacciones humanas, estigmatizamos a las mujeres por decir lo que de verdad queremos, porque "lo vas a espantar huevona". Así es como cada vez nos alejamos más del objetivo que en un principio nos sacó de la cama, nos hizo depilarnos de pies a cabeza, ponernos las extensiones en el pelo y afilar las garras contra las otras depredadoras: el simple y extremadamente normal hecho de querer  una relación monogama (o que viva el poliamor) y alguién con quien compartir tu universo y tus bordes. 

Y sí, fui la chica de la cerveza y la historia por muchos años. Porque a nadie le gusta el rechazo. Menos a esta mujeralborde que si peca de algo es de tener un corazón en bandeja que aprendí, con el tiempo y la mala praxis, a taponear y esconder. 

Pero saben que, ya no quiero serlo más. Paso de las conexiones de una noche en las cuales tengo que cuidar mis palabras, del "si te lo follas la primera vez no te va a respetar", de la ruleta rusa del Tinder y del ser la terapeuta de incontables hombres que odian a sus madres. 

Paso de engañarme a mi misma con que por ser una mujer fuerte y con opinión siempre la tendré un poco más dificil. 

Seamos más honestas. Seamos más valientes, pero sobre todo, seamos más vulnerables. Y esto también va para los muchachos. 

Y es que parte de ser una mujeralborde es saber cuando es momento de bajar las defensas y disfrutar, aunque sea por una noche, de decir sinceramente qué es lo que quieres. 

Sé todo lo que quieras ser, mujer. 

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